Rovi ha cerrado 2018 con los datos más bajos de accidentalidad con baja en las plantas de su historia. Según ha informado el Departamento de Seguridad y Medio Ambiente (SYMA), todas la plantas han estado por debajo del objetivo del grupo, situado en 1,5 por ciento (número de accidentes/número de trabajadores por 100) y han registrado este año las ratios más bajas desde su puesta en funcionamiento.
Según las cifras, Alcalá cerró 2018 con una tasa de accidentalidad con baja del 1,3 por ciento; Madrid y San Sebastián de los Reyes, con una del 1 por ciento y Granada, con un 0%.
Ana Fernández-Lobato, directora del SYMA, explica que «el objetivo real deseado siempre es el 0% y es por el que debemos seguir trabajando. No obstante, quiero dar mi más sincera enhorabuena a todos y, en especial a Granada por demostrarnos una vez más que ese cero es real y alcanzable».
«Son los mejores datos de accidentalidad de histórico de cada una de las plantas y ese esfuerzo merece también nuestra más sincera enhorabuena y reconocimiento. Una vez más, felicidades por estos datos, y en especial por todo el trabajo que los equipos de cada planta hacéis cada día para que el ambiente de trabajo sea más seguro y saludable», añade la responsable.


